lunes, 1 de marzo de 2010

SOLO UNA POSESIÓN.


EL DE LA COLETA.



Mi compañero de graderío, el que se sienta a la derecha, agente del orden retirado para mas señas, le llama “el de la coleta”. No. No en termino despreciativo, no crean. Le dice de esa manera de forma cariñosa. Los hay peores, como en todo. Mas arriba, escucho mucho el sobrenombre de bailarín, cuando a Francis Sánchez se refieren. Cosas que tiene el ver los partidos entre el pueblo llano, ese que emite sentencias en consonancia de un acierto que, no siempre es el deseado.

Francis Sánchez llegó como sensación a primeros de verano. Fue el primer grande que trajo Piti. Traía marco de figura tras su paso por Tenerife. Exponía buenos números y la idea era que, como tirador, tenia solvencia.

En el año de la modificación de distancia para los tres puntos, Francis, intentaba adaptarse al juego de pocas opciones que le ofreciera el sistema al comienzo y luchaba por demostrarse y demostrar el verdadero sentido de su llegada al proyecto.

EL camino, hasta ahora no le ha deparado grandes noches. El alero no ha derrochado con su tiro, grandes alardes. La llegada de Aranzana, ratifica la confianza que siempre un tirador debe tener. Hay quien le achaca poco pundonor defensivo. Criterios para todos los gustos acompañan la figura de quien tiene la responsabilidad de sacar de entuertos a su equipo, metiéndolo con lanzamientos de distancia en momentos complicados.

Hubo partidos, en los que las criticas elevaron su tono a modo de gritos. Por entonces no acompañaba tampoco el equipo y el cabeza de turco lanzaba sin el éxito deseado.

Francis Sánchez, no presenta pues, muchos simpatizantes. Para que negarlo. No es precisamente su mejor año. Como buen lanzador, Francis, es frío. De recto gesto y siempre buscador de esa canasta que lo haga mas simpático de cara a la bancada. No tengo duda de que, la vara que mide el nivel de confianza, ahora no denota mucho corazón para con el jugador. Pero no pierde la mirada del aro. Eso le honra. Al mismo tiempo le desquicia sus números si la noche no es acertada como sucediera la del viernes pasado, en tan especial velada, ante un Menorca, al que se le dejaron, ocho muescas desde la raya de tres. Ninguno por parte del malagueño. Cosas de este negocio.

No brilló el nueve. Fue el único jugador que valorase negativo. Su noche se antojó frustrante. De esas que emanan soledad de sensaciones.

Yo para que negarlo, le veo desde luego, con ganas de sobresalir.

Muchos periodistas deportivos, hablan, en casos como este, de la suerte de los tiradores. Puede ser. Para mi es cuestión de otras muchas cosas.

Aparte de la capacidad y preparación, importa la confianza. A Francis, no le falta. Su entrenador, su equipo se fían de él, minutos no le faltan. La grada, si sus tiros entran, lo hará también, seguro, no me equivoco.

Hasta que ello suceda, no queda mas remedio que resignarse. Eso, o caer en el desespero que también es opción.


Romualdo.

4 comentarios:

Julián dijo...

Pues yo soy de los que se desesperan con este tio, me pone de los nervios, no solo es lo que falla, que perdemos cantidad de puntos por su culpa, es por lo que deja que nos metan pues en defensa es malisimo.
A ver si se encuentra antes de que termine la temporada.

Anónimo dijo...

Sí, él mira al aro pero no nos ofrece canastas que es a lo que ha venido, es tirador y se tira todo sin posición y pocas son las que mete, a ver si mañana nos da una alegría.

el del lado dijo...

es que el de la coleta lo tira todo y defiende como el culo. con lo ancho que soy yo y el que se sienta detrás de mi defendíamos mejor aunque sólo sea un minuto, por eso de la edad. Verás como el de la coleta nos da noches de gran alegría, ya lo veréis. saludos.

Anónimo dijo...

Pues espero que estes en lo cierto "el del lado" porque me parece que solo nos ha dado una noche de alegría y no fue en casa.