miércoles, 7 de enero de 2009

AL FILO DE LA CANASTA.

La experiencia es un grado.

Rotunda, es la expresión de que la experiencia es un grado; tan rotunda como certera, pues todos fuimos testigos el pasado domingo de lo acontecido durante el encuentro contra Lleida. Adolece desgraciadamente nuestro equipo de ese síndrome censurable, que nos hace vulnerables e irregulares en ciertos periodos del partido, normalmente a partir del tercer cuarto. No pretendo, ni mucho menos, poner en duda la experiencia individual, pues de todos es sabido que desde ese punto de vista, está más que demostrada, pero no tengo más remedio que, insistir en la conjunción del equipo, el cual, pinta distintos comportamientos a lo largo del encuentro. Falto de ideas, cuando las cosas vienen mal dadas, incapaces de soportar la presión del marcador, encajando pájaras de las cuales, es incapaz de recuperarse, no siendo así, en el caso contrario de ser administrador de una buena renta de puntos, cosa lógica por otro lado. Pero la realidad de la competición, no es esa, más bien, se antoja apretada en esta Leb de oro, con lo cual, si no ponemos freno a estas situaciones, estaremos corriendo el riesgo irremediable de recibirlas todas en el mismo lado.

Esperemos que dicho comportamiento, pueda corregirlo el Sr. Hurtado, para bien de todos, me gustaría achacar la última derrota a un estado caótico motivado por el parón navideño. ¿Dónde está esa defensa, que vimos a final de año?, incomprensible, encajar cinco canastas, con la misma pizarra; pase en profundidad, hombre solo bajo el aro y ¡zas!, cara de póquer, por favor, Srs., una vale, dos, bueno está, tres …, ese agravio, suma diez puntos, el que quiera que reflexione. Y como digo siempre, de todo se aprende, a veces, un tirón de orejas, despierta los sentidos, para hacer que el trabajo diario sirva para algo, por lo tanto, ánimo, pónganse las pilas y desdibujen su última imagen, que nada tiene que ver con la realidad que les corresponde.

En otro orden de cosas, no quiero dejar pasar la necesidad de destacar a un hombre que pese a los 14:19 minutos jugados, con una puntuación de 8 y valoración de 4, (fríos números); está sumando enteros, haciendo un baloncesto sencillo, pero muy eficaz, demostrando una concentración regular, me refiero al querido guerrero de la tierra, el Sr. Sanguino. Esta semana, su estandarte colgará de mi torre, por supuesto, junto al de el Sr. Simien, abonado a esta consideración, desde los inicios.

Queridos amigos, el próximo viernes volvemos a jugar con el séptimo de la tabla, lo que es igual, mismo grado de calidad, de verdad espero y deseo que la lección haya sido aprendida, y el Grupo Begar León, sea el que pague el pato de lo que pudiera ser, nuestro grado de experiencia.

Guardián de la Torre.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Pues que pague el pato el León porque lo que si está claro es que nosotros la afición estamos cansados de darles tanto bálsamo a estos chicos que nos responden con derrotas y desde luego si este también lo perdiesen en casa sería caótico y creo que no nos quedaríamos callados, sería peor que el domingo. Estaremos con el equipo como siempre pero que ellos estén tambien con nosotros.

Anónimo dijo...

El equipo no está trabajado, los aleros se tienen que buscar la vida para tirar, no se hacen bloqueos para el tirador, no se meten balones para los pivots, los ajustes de la zona son pésimos y nos atacan con demasiada facilidad, no se piden los tiempos cuando es necesario, todo esto lo ven los equipos que tenemos enfrente y como no los entrenadores que son los que a final nos ganan los partidos por la falta de profesionalidad del nuestro.

Anónimo dijo...

¿Piti sabes que es pick and roll? creo que si no lo sabes debes aprenderlo y si lo sabes ¿por qué no lo practicas?
El otro día salimos cabreados no porque se perdiera fue por como se perdio.

Anónimo dijo...

No creo que lo mas razonable para preparar una victoria sea la amenaza. Los mas interesados en ganar son los que juegan, nosotros solo nos queda el papel de animar y mandar buenas vibraciones, lo contrario es nefasto. Y no somos tecnicos, somos defensores de lo nuestro.