NOCHE SOSA PARA GANAR A BENFICA.
Cáceres 2016basket: Mediano (7), Xavier (10), Angulo (12), Humphrey (12) y McCoy (17); Antelo (0), Francis (10), Movilla (5), Sanguino (2), Chema G (0) y Luis F (-).
Benfica: Henry (6), Reed (4), Evans(6), Jenkins (10), Jordao (9); Mascarenha (7), Evora (12), Carreira (-), Minhava (4), Viana (0) y Tavares (10)
Parciales: 21-8; 9-20 (30-28); 22-18; 23-22 (75-68)
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José Ant. Bola González. Cáceres.
Sin lugar a dudas, no fue el mejor partido para terminar la pretemporada. Exceso de ingredientes aportaron una noche sosa y rara para dar el pistoletazo, a un año que debe decir mucho en el baloncesto de Cáceres.
Poco aforo, mucho nervio, poco aguante en el rival en cuanto a escaso nivel arbitral, ausencia de Cherry, mucho para organizar un buen partido de baloncesto en un torneo Patrimonio, huérfano de Ayuntamiento y escaso de juego.
Benfica, compitió a rachas en una noche con muchas ausencias en las butacas de un Multiusos, que no ha visto claro el juego cacereño en los dos partidos que ha presenciado, de este 2016 para el curso 2010-11.
El Cáceres, lejano aún de su estado de gracia, ha mejorado en su juego interior. No del todo. Eso hizo de Macoy, centro de muchas miradas, el mejor de un partido que deja, como recuerdo, la foto de Sanguino tomando el trofeo.
Justo resultado, 75-68 para desgranar la historia de un partido que naciera en la esperanza de un 21-8 en el primer cuarto de seguridad defensiva ante la anarquía lusa.
Luego, Benfica se sobrepuso y logró, con la colaboración local, estrechar el marcador con un segundo cuarto al contrario, 8-21.
Asustado el Cáceres, por aquello de saldar los dos partidos en el Multiusos con sendas derrotas, apostó por ser fuerte y sincero en el tercer acto. Ajustó la zona para imponer el rebote y la colocación ante el rival. Évora chocó entonces con Macoy y, a pesar de no soltarse del todo en el luminoso, si comenzó el equipo anfitrión, a sentirse mas seguro en los tableros. Allí solventó la riña.
Humprhey destelló en algunas acciones para ir tomando el impulso de un angustiado Benfica, demasiado pendiente de la pareja de jueces.
Así y todo, la pelea se mantuvo hasta el minuto 35. Para entonces, la distancia se alargó lo suficiente para aparcar las aspiraciones a un desajustado Benfica.
No son los portugueses, nada grande, pero aparentan cierto nivel.
El Cáceres, ya mira a la temporada. Mejoró en su físico, en juego interior y echó mucho de menos a Cherry. Añoró, el tiro exterior, 6 de 26 tiros de tres y precisa mas dinámica.
Pero bueno, el trofeo quedó en casa, la revancha de Lisboa saldada, Macoy, sin ser lo que debe ser, MVP y la idea de ser un equipo importante, en alza.
Lo peor, la poca afluencia.
Lérida, primera estación.
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