martes, 4 de diciembre de 2007

MADUROS CON PREMURA

OPINION:
CONJURADOS.
Vivimos inmersos en una nebulosa competitiva, todo cuanto nos rodea en este mundo es pura y dura competencia. En el deporte no es por menos, los resultados mandan desde el primero de los momentos, entre otras cosas porque el deporte, desde siempre se ha basado en resultados. En el mundo actual, esos resultados van unidos a esa delgada línea que une los dos extremos fríos de la realidad: Economía-resultados, o viceversa.


Se me antojan demasiados los avatares vividos por el Cáceres 2016 en su corta vida. La resurrección del baloncesto en nuestra ciudad fue recibida con la expectación que se esperaba y que se añoraba desde que la historia, por llamarlo de alguna manera, nos sustrajo del hecho real de que Cáceres es una ciudad de Baloncesto.
Son demasiadas emociones para estos pocos meses en los que hemos vivido el nacimiento, la niñez, la adolescencia así como la madurez del club, demasiado prematuramente.
De ese modo , hemos visto como la euforia del inicio se volcaba en un entusiasmo loco cuando los cuatro de los primeros partidos disputados en competición liguera se saldaban con cuatro victorias, dos de ellas fuera de nuestro pabellón. Nuestra niñez era alegre, como debe ser la niñez, los mayores se ocupaban y bien, de buscar el dinero para los inicios y los chicos se dedicaban a jugar con entusiasmo y con mas o menos acierto. Veíamos a un equipo con posibilidades muy altas, en una competición nueva que se nos atojaba asequible a cualquier logro.
El pabellón, en los partidos de casa iba viendo como los asientos poco a poco se llenaban de voces, de identificación con un proyecto mimado por todos ,que hacia que la atmósfera de incertidumbre inicial por el que pasaba, se evaporase con demasiada rapidez, todos entramos en la adolescencia del equipo cuando apenas este tenia tres meses de vida. Vimos la vitalidad, la fuerza que la propia adolescencia, de lo desconocido por venir y lo desconocido del presente.
Los aficionados no conocíamos, al menos el aficionado medio, la liga en la que nos encontrábamos, esa competición igualada y dura en la que ascender es complicadísimo y estar en los puestos de descenso al final de la temporada, al menos que no te espabiles, es demasiado sencillo. Y así, como el que no quiere la cosa, terminamos de repente la adolescencia y caímos en una madurez prematura a la fuerza.
Sin pedirlo, sin saber como, los problemas de la vida madura nos cayeron encima, de repente; llegaron problemas que no habíamos conocido, no por que no existieran sino porque teníamos tan poca vida que no habíamos tenido oportunidad de haberlos vivido. Bajas, lesiones, problemas económicos, refuerzos y otras cosas mas, que nos meten el la vorágine de las derrotas, del mar humor, de la poca motivación, del miedo, de la desconfianza y las prisas, de las criticas.

Y llegan siete derrotas y la nebulosa se empieza a convertir la atmósfera de aviso a navegantes que recupera fantasmas vividos. Así hasta el dic de ayer.
En una vida tan corta demasiados avatares ya digo.

UNA ETAPA.

Ayer termino en nuestro jovencísimo Cáceres 2016 una etapa, la de su nacimiento. Rápidamente somos maduros, hemos conocido la destitución de un entrenador y estamos viviendo la estrechez económica de todo equipo joven a la espera de ese dinero que no termina por hacerse efectivo.
Ahora que somos maduros, tan precipitadamente, miremos la realidad con esa madurez de aprender de errores, si los hubo, anteriores. Queda mucho por vivir, porque ser maduro no es tan malo, todo lo contrario, ser maduro es saber vivir y luchar. Hemos renacido y tenemos otras expectativas quizás mas reales, mas sensatas que el espejismo y la euforia que las primeras cuatro victorias nos nublaron, ahora el sitio del Cáceres no esta fuera de jugar al baloncesto, de recuperar la confianza perdida en ellos mismos, por esos motivos que hasta el momento nadie ha explicado con toda la claridad deseada, pero que se sospechan con la misma claridad.
Declaraciones como la de Fede sin decir nada de lo ocurrido, o esa frase que medio se le escapa al presidente anunciando el cese de su primer entrenador contratado, siembran la duda de lo sucedido, (el equipo se le ha ido de las manos).
La afición, la que hace equipo, la que esta allí y frente a la pantalla, la que lee en Internet, la que escribe comentarios, la que compra el periódico o escucha la radio, la que acude al pabellón, también madura con demasiada rapidez en esta corta vida del Cáceres 2016. Ahora como se ha escrito en la jornada de hoy en la prensa el único objetivo es jugar al baloncesto. Ver que somos eso , unos profesionales que juegan a este deporte y que saben hacerlo, lo de ganar y tener aspiraciones a algo llega con el trabajo y la madurez. Doy por echo la segunda aunque precipidamente, unida a la sensatez la hemos encontrado.
Se lee en el Blog del club que hay una conjura, por parte de los capitanes para ganar al próximo partido y recuperar parte de lo perdido. Me entusiasma esa conjura, como parte de esta familia me anima porque me gusta mi equipo y lo vivo; como aficionado a este deporte y tal vez como persona denoto cierta tristeza por no haber visto esa conjura unas semanas antes. Como seguidor de todo lo ocurrido, entiendo aun mas ahora, los silencios de Fede ayer en la entrevista de la SER y me cabe preguntarme ¿Se hubiera ganado en Sabadell si nos hubiéramos conjurado para ello?.
Agua pasada tal vez, pero en la madurez se aprende de los fallos de la adolescencia. Todos.
Punto y seguido.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Una vez más felicitaciones, es fantástico.
Aupa Cáceres, Aupa Piti.

Anónimo dijo...

Buenos pues a ver si se conjuran y ganan que es lo que queremos ya, o al menos ver una mejoría.

Anónimo dijo...

El pasado no existe, solo quedan las secuelas,y el futuro es el viernes.Hablemos del Gijón: Tambien tuvo su historia paralela en la ACB. Americanos solventes (Hay detrás mucho dinero de las empresas asturianas), entrenador en apariencia tullido, pero no más que Piti. Si ponemos lo que hay que poner se les puede ganar.La clave va a estar en el tiro exterior y en los libres.

Anónimo dijo...

Quise decir "curtido", no tullido.Perdón.